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Tarjetas eSIM

La eSIM, o SIM integrada (Módulo de Identidad del Suscriptor), es una versión digital de la tarjeta SIM tradicional. A diferencia de las SIM físicas, la eSIM está integrada directamente en el dispositivo, lo que te permite activar un plan móvil sin necesidad de insertar una tarjeta física.
Las eSIM funcionan almacenando de manera digital el perfil del operador de telefonía móvil en el chip integrado del dispositivo. Puedes activarla escaneando un código QR o introduciendo la configuración de tu operador, lo que permite una conexión instantánea y sin interrupciones a la red local.
La eSIM es muy práctica para cambiar de operador, lo que la hace ideal si necesitas dos números de teléfono para el trabajo y lo personal, o si viajas al extranjero. Al eliminar la necesidad de tarjetas SIM físicas, permite utilizar redes duales y optimiza el espacio en tu dispositivo.
Sí, puedes conservar tu número de teléfono con una eSIM. Para hacerlo, solo necesitas transferir tu plan de telefonía móvil actual a la eSIM a través de tu operador. Sin embargo, si adquieres un nuevo plan, será necesario que consultes con el proveedor específico.
La mayoría de los smartphones modernos son compatibles con eSIM, incluidos los últimos modelos de iPhone, Google Pixel, Samsung Galaxy y algunos dispositivos de Oppo y Huawei. Antes de comprar una eSIM, te recomendamos verificar las especificaciones de tu dispositivo para asegurarte de que sea compatible. Más información: Teléfonos compatibles con eSIM
Para transferir una eSIM, primero debes desactivarla en tu dispositivo actual a través de la configuración del operador. Luego, activa la eSIM en el nuevo dispositivo escaneando el código QR o ingresando los datos correspondientes. Ten en cuenta que el proceso exacto puede variar según el dispositivo y el proveedor.
Configurar una eSIM es rápido y fácil: solo necesitas unos minutos. Compra la eSIM, ve a la configuración de tu dispositivo y selecciona la opción Añadir eSIM. Luego, escanea el código QR proporcionado por tu operador con la cámara y sigue las instrucciones en pantalla para completar la activación. Ten en cuenta que el proceso exacto puede variar según tu dispositivo y operador.
Puedes activar una eSIM escaneando el código QR proporcionado por tu operador o ingresando manualmente los datos en la configuración de red móvil de tu teléfono. La activación debería ser automática (si estás de viaje, se activará una vez llegues a tu destino).
La activación de una eSIM suele tardar solo unos minutos, pero el tiempo puede variar según el operador y la señal en tu ubicación. En algunos casos, la activación puede demorar hasta 24 horas, así que asegúrate de dejar suficiente tiempo por si acaso.
La adopción de la eSIM está limitada por la compatibilidad de los dispositivos y el soporte de los operadores, ya que en algunas regiones aún no hay un acceso amplio a esta tecnología. Además, depende de la concienciación de los usuarios. Algunos prefieren las tarjetas SIM físicas porque están acostumbrados a ellas, mientras que otros aún no cuentan con un dispositivo compatible con la eSIM..
No, una eSIM no debilita la señal. La intensidad de la red depende de la cobertura del operador, no del tipo de SIM que utilices.
Las eSIM ofrecen flexibilidad, lo que permite cambiar fácilmente de operador y de plan sin una tarjeta física. Ahorran espacio en los dispositivos y permiten la funcionalidad de doble SIM, lo que las hace ideales para viajeros frecuentes.
Sí, la mayoría de los dispositivos con doble SIM te permiten usar una eSIM junto con una SIM física. Por lo tanto, si tienes un teléfono compatible con eSIM con una ranura para tarjeta SIM física, puedes instalar tu eSIM y gestionar ambos planes al mismo tiempo.
Sí, puedes almacenar varios perfiles eSIM en un dispositivo. Sin embargo, solo uno o dos pueden estar activos a la vez, dependiendo del dispositivo.
Sí, las eSIM son tan seguras como las tarjetas SIM físicas (si no más). Están protegidas por encriptación y son más difíciles de eliminar o clonar sin acceso al dispositivo.
Las eSIM en sí mismas no afectan significativamente la duración de la batería. Sin embargo, el uso de dos SIM o el mantenimiento de varias redes activas simultáneamente puede agotar la batería más rápido.
Si tu teléfono no tiene ranura para tarjeta SIM, ¡entonces ya estás utilizando una eSIM! Las eSIM eliminan la necesidad de tarjetas SIM físicas, ahorrando espacio en el dispositivo.
Si vas a viajar al extranjero, configura tu eSIM al menos 24 horas antes de viajar. De esta manera, podrás dejar tiempo para que la eSIM se active antes de llegar a tu destino.
Los datos no utilizados normalmente caducan cuando finaliza tu plan, a menos que tu operador ofrezca datos renovables. Comprueba siempre las condiciones del plan antes de la compra.
Si agotas todos tus datos, puedes comprar una recarga o continuar a una velocidad reducida, dependiendo de la política de tu operador. La mayoría de las veces, no podrás utilizar más datos hasta que renueves o recargues tu plan.
Sí, algunos operadores ofrecen planes de datos ilimitados para eSIM, incluso para viajes internacionales. La disponibilidad y las condiciones varían según la región y el proveedor.
Sí, muchos proveedores internacionales de eSIM ofrecen planes que funcionan en varios países, lo que los hace ideales para viajeros. Algunos ejemplos son Holafly y Airalo.

Tarjetas SIM para viajar

Las tarjetas SIM locales están diseñadas para usarse en un país o región específicos, ofreciendo tarifas más económicas para llamadas locales, mensajes de texto y datos. Por otro lado, las tarjetas SIM internacionales brindan conectividad en varios países, lo que las convierte en una opción ideal para los viajeros que necesitan un servicio constante sin tener que cambiar de SIM en cada destino.
Sí, generalmente puedes utilizar tu tarjeta SIM doméstica en el extranjero, pero depende de tu operador, plan y destino. Muchos operadores ofrecen itinerancia internacional, aunque a precios más altos, lo que podría generar cargos elevados. Te recomendamos verificar las políticas de itinerancia de tu operador antes de viajar.
El tipo de SIM que necesitas depende de tus necesidades. Las SIM locales son ideales para estancias largas o para el uso frecuente de datos en un solo país. Las SIM internacionales son prácticas para viajes a varios países, ya que ofrecen cobertura en diferentes destinos. Las SIM personales son adecuadas si solo necesitas roaming ocasional o si tu operador ofrece planes internacionales asequibles.
Las tarjetas SIM físicas y las eSIM son igualmente fiables en la mayoría de los casos. Las eSIM ofrecen mayor comodidad al permitir activación remota y soportar múltiples perfiles, mientras que las tarjetas SIM físicas suelen ser más compatibles con dispositivos más antiguos o menos avanzados. Más información: SIM frente a eSIM.
Si compras una tarjeta SIM local para tu viaje, puedes cargar crédito en quioscos, tiendas de operadores o en línea. En el caso de las tarjetas SIM internacionales, las recargas generalmente están disponibles en el sitio web o la aplicación del proveedor. Algunas tarjetas SIM de viaje incluso permiten recargas automáticas para garantizar un uso continuo sin interrupciones.
Puedes activar una tarjeta SIM de viaje simplemente insertándola en la bandeja de tu teléfono. Luego, sigue las instrucciones en pantalla, que pueden incluir la introducción de un PIN. Si se te solicita, reinicia tu dispositivo y asegúrate de que se conecte correctamente a la red.
Puedes comprar tarjetas SIM de viaje por adelantado en línea o en los aeropuertos. Las SIM locales generalmente se compran al llegar a tu país de destino, mientras que las SIM internacionales están disponibles en línea antes de tu viaje.
Las tarjetas SIM internacionales se pueden adquirir en línea a través de proveedores globales, en aeropuertos o en agencias de viajes especializadas en soluciones de conectividad.
Puedes conseguir una tarjeta SIM local en el aeropuerto al llegar a tu destino, o bien comprarla en tiendas de conveniencia o en tiendas oficiales de operadores en las principales ciudades. Asegúrate de tener tu pasaporte a mano, ya que es posible que necesites un documento de identidad para realizar la compra.
Para evitar cargos inesperados con tu tarjeta SIM de viaje, desactiva las opciones de recarga automática o de crédito adicional según sea necesario. Luego, controla tu consumo a través de la aplicación de tu operador. Algunos operadores permiten establecer límites de datos en tu teléfono para evitar el uso excesivo. Al regresar a casa, asegúrate de desactivar la SIM y el roaming para evitar cargos adicionales.
Las tarjetas SIM locales suelen caducar a los 30-90 días de inactividad. Las tarjetas SIM internacionales pueden permanecer activas durante meses, pero la duración exacta depende del proveedor. Comprueba las condiciones para evitar perder el crédito o el servicio.
Las tarjetas SIM de viaje suelen ser más rentables y sencillas para los viajeros en solitario, mientras que los dispositivos WiFi portátiles son ideales para grupos, ya que pueden conectar varios dispositivos simultáneamente. Sin embargo, los dispositivos WiFi requieren carga y a menudo tienen tarifas de alquiler y posibles penalizaciones por pérdida o daño.

Opciones de Internet en el extranjero

Puedes acceder a Internet en el extranjero utilizando opciones como tarjetas SIM locales o internacionales, eSIM y puntos de acceso WiFi portátiles para conectarte a la red local. También puedes usar WiFi pública. Elige el método que mejor se adapte a la duración de tu viaje y a tus necesidades de datos; muchos viajeros internacionales consideran que las eSIM o las SIM internacionales son las más convenientes. Más información: 6 formas de obtener Internet global durante tu viaje.
Para un uso ligero (mapas, mensajería, navegación ocasional), de 1 a 3 GB por semana podrían ser suficientes. Los usuarios moderados (streaming, navegación regular) podrían necesitar de 5 a 10 GB. Los usuarios intensivos (videollamadas frecuentes, juegos) podrían requerir más de 15 GB.
Existen varias opciones para acceder a Internet en el extranjero, entre ellas: eSIM, SIM internacionales, SIM locales, puntos de acceso WiFi portátiles, itinerancia de planes domésticos y WiFi público. Asegúrate de elegir la mejor opción para ti antes de viajar. Más información: 6 formas de acceder a Internet global durante tu viaje.
Sí, el WiFi público es una opción ampliamente disponible en muchas ciudades importantes de todo el mundo. Sin embargo, puede ser lento, poco fiable e incluso arriesgado debido a posibles problemas de seguridad. Considera la posibilidad de utilizar una VPN para proteger tus datos.
Los puntos de acceso WiFi portátiles son pequeños dispositivos que se conectan a redes móviles y permiten acceder a Internet en varios dispositivos. Son ideales para viajes en grupo o cuando necesitas mantener varios dispositivos conectados, pero requieren carga y pueden implicar costos adicionales por alquiler o compra.
Sí, puedes usar los datos de tu plan de telefonía móvil doméstico en el extranjero, pero es importante verificar las tarifas de itinerancia internacional de tu operador. Algunos planes ofrecen paquetes internacionales asequibles, mientras que otros pueden ser bastante caros. En muchos casos, utilizar una tarjeta SIM de viaje o una eSIM es una opción más conveniente y económica.
Para viajes cortos, las mejores opciones para acceder a Internet son las tarjetas SIM internacionales, las eSIM o los puntos de acceso WiFi portátiles. Proporcionan un acceso fiable sin complicaciones. Sin embargo, para estancias más largas, merece la pena considerar las tarjetas SIM locales.
Sí, puedes habilitar la función de punto de acceso de tu teléfono para compartir datos con otros dispositivos. Sin embargo, asegúrate de que tu plan SIM permita el anclaje a red y tenga datos suficientes para múltiples conexiones. Los puntos de acceso WiFi portátiles son otra gran opción para compartir datos.

Roaming

El roaming es una función que permite que tu teléfono se conecte a redes fuera del área de cobertura de su operador local, lo que permite realizar llamadas, enviar mensajes de texto y usar datos en el extranjero. Utiliza redes asociadas en el país de destino, a menudo con costes adicionales.
La itinerancia utiliza tus datos móviles de la misma manera, pero conectándose a otra red. Como resultado, tu operador a menudo te cobrará tarifas adicionales para acceder a tus datos, y puede haber limitaciones adicionales en tu plan.
Mantente fuera de roaming, a menos que tengas un plan internacional para evitar cargos inesperados. Utiliza una eSIM, SIM locales o WiFi como alternativas rentables.
Puedes evitar las elevadas tarifas de itinerancia contratando un plan de itinerancia internacional con tu operador, lo que puede suponer un coste adicional. También puedes utilizar eSIM o SIM locales para una opción más asequible, o conectarte a una red WiFi pública de forma gratuita. Asegúrate de desactivar la itinerancia y descargar mapas y otros contenidos con antelación para utilizar menos datos.
Los planes de itinerancia internacional ofrecen tarifas con descuento para llamadas, mensajes de texto y datos en el extranjero. Por ejemplo, las operadoras estadounidenses como Verizon y ATT ofrecen pases diarios o paquetes mensuales para viajeros. Estos planes son convenientes para viajes cortos, pero pueden ser caros en comparación con las SIM locales o las eSIM para estancias prolongadas.
Sí, la mayoría de los operadores cobran por las llamadas y los mensajes entrantes, así como por los salientes. Sin embargo, los SMS entrantes pueden ser gratuitos, dependiendo de tu operador y plan.
Sí, el roaming puede agotar la batería más rápido de lo normal, ya que el teléfono busca y se conecta con frecuencia a redes asociadas. Puedes minimizar el consumo de batería desactivando el roaming o utilizando el modo avión con WiFi activado.
Sí, hay aplicaciones como My Data Manager que te ayudan a controlar el uso. A menudo, es más sencillo utilizar la aplicación de tu operador para controlar la cantidad de datos que utilizas y hacer un seguimiento de los costes en itinerancia.
Sí, puedes utilizar la itinerancia de datos en un crucero, pero suele ser costosa, ya que los servicios se conectan a través de redes satelitales. En los vuelos, deberás poner tu teléfono en modo avión durante todo el viaje. Si deseas conectarte, puedes utilizar los paquetes WiFi disponibles a bordo o durante el vuelo.
Sí, hay varias opciones de roaming para viajeros frecuentes, incluidas las SIM internacionales y las eSIM internacionales. Los planes de roaming como Magenta Max de T-Mobile o Google Fi también ofrecen cobertura global.

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